Psicología aplicada al Deporte
¿Qué es la Psicología deportiva?
La psicología deportiva es la zona de la psicología aplicada que estudia la conducta humana previamente, a lo extenso de y luego de la actividad deportiva respecto a la personalidad, a la motivación, a las tasas de ansiedad y de agresividad, a las dinámicas de conjunto en los deportes colectivos, pues el atleta experimenta situaciones mentales extremas y que corresponden sensaciones impulsivas que no se expresan en las ocupaciones clásicas del deportista. Además, la psicología del deporte se enfoca en el análisis de técnicas encaminadas a maximizar las habilidades mentales de cada atleta, como su concentración, atención, control sobre los sentimientos y como hacer uso de ellas en instantes estratégicos de cada deporte.
Tampoco, en la psicología deportiva, se debería dejar de lado la motivación presente en cada atleta dentro y fuera del campo de juego, su grado de compromiso y perseverancia. No se debería olvidar que cada atleta tiene cualidades diversas a los otros y son puntos que tienen que ser valorados para generar una estrategia de mediación dirigida a maximizar sus habilidades mentales en pro de un mejor funcionamiento de emociones dentro y fuera del lote de juego a grado competitivo o en el deporte de elevado rendimiento.
Se debería distinguir al deporte recreativo del deporte competitivo y comprender que la Psicología del deporte, solo es aplicable a grado competitivo y de elevado rendimiento.
Aplicación e investigaciones
Además de las averiguaciones de neuropsicología que se garantizan de técnicas psicofísicas, y a las indagaciones conductuales como el control de tiempos de actitud, la psicología deportiva ha realizado un examen para medir la ansiedad en la actividad deportiva (Sport Competition Anxiety Examen - SCAT), para intentar con la agresividad con la motivación se han predeterminado técnicas existentes modificadas para servir al deportista como el relajamiento, el entrenamiento autógeno, el biofeedback, la hipnosis, el entrenamiento a las interacciones interpersonales en caso de un deporte de grupo.
Las indagaciones de la psicología deportiva, de personalidad, de la motivación y de la predominación social, con estudio multivariadas e interactivas. Los desórdenes psicológicos y de comportamiento son ordinarios en chicos y jóvenes. Una optimización de la autoestima es una manera de prevenir el desarrollo de dichos inconvenientes. Diferentes estudios y revisiones indican un impacto positivo de la actividad física sobre la depresión, la ansiedad e inconvenientes de conducta en chicos y jóvenes.
No obstante, dichos estudios no se han actualizado a partir de su publicación inicial, por lo cual es elemental una revisión actualizada sobre la efectividad de las intervenciones fundamentadas en el ejercicio para fomentar la autoestima en los chicos y adolescentes. Una revisión sistemática de 23 estudios, hechos en USA, Canadá, Australia y Nigeria, y cuyos competidores fueron chicos y jóvenes entre 3 y 20 años de edad, concluyó que las intervenciones de ejercicios físicos poseen efectos positivos sobre la autoestima, por lo menos en el corto plazo. No hubo diferencias significativas en los efectos de acuerdo con la duración o el tipo de participación, y ya que no se entregaron resultados de seguimiento, son desconocidas los efectos a largo plazo. Sin embargo, hay numerosas deficiencias metodológicas y sesgos en los estudios, por lo cual se requieren más averiguaciones que posibiliten prueba más robusta.
Historia
Las llamadas Ciencias del Deporte configuran una totalmente nueva composición científica que toma de todas las especialidades en general pertinentes, esas temáticas ligadas al análisis de los fenómenos asociados a la actividad física y al deporte.
En el lapso de los últimos 30 años, ha aparecido un nuevo campo en las ciencias del deporte. Se ha nombrado Psicología del Deporte y se ocupa, por un lado, de los componentes psicológicos que determinan el ejercicio físico y la práctica deportiva; y, por otro, de los efectos psicológicos que se derivan de tal colaboración. Los psicólogos del deporte estudian la motivación, la autoconfianza, concentración, personalidad, dinámica de conjuntos, liderazgo, ejercicio físico y confort psicológico, la predominación de las actitudes emocionales a lo largo de las competencias deportivas, y varios otros puntos de la práctica deportiva y la actividad física.
Entre otras funcionalidades, los psicólogos del deporte se desempeñan en la docencia, la averiguación y en el trabajo con deportistas y entrenadores a fin de ayudarlos a mejorar el rendimiento y potenciar las capacidades psicológicas de los diferentes deportistas. La Psicología del Deporte despliega su contribución tanto en el campo del deporte competitivo como en el deporte formativo (educación inicial, media y superior).
Asimismo, tiene aplicaciones en el sector del deporte recreativo. Sin embargo, la actividad de elevado rendimiento constituye solo una sección del extenso espectro del deporte competitivo. La condición de cientificidad de sus procedimientos involucra la probabilidad de producir y utilizar métodos con la intención de obtener informaciones repetibles, controlables y transmisibles. El marco conceptual que fundamenta el enfoque de la materia nace desde las propias necesidades del aporte profesional que, en el deporte, necesita de una participación psicológica.
En este sentido, el propósito del trabajo psicodeportológico, se apoya en optimizar los recursos particulares enfocados en su interacción con el rendimiento deportivo. La capacidad de un psicólogo de la actividad física y el deporte empieza con una evaluación psicológico-deportiva que se adecuará al área de actuación (deporte de rendimiento, de base e iniciación o deporte de tiempo libre, salud y tiempo libre). Prosigue con una idealización y programación de la mediación a hacer y continua con la evaluación o control del trabajo realizado. Estas funcionalidades tienen la posibilidad de complementar con otras referentes a la enseñanza, formación e indagación. La evaluación se fundamenta en los principios establecidos a partir de la psicología científica por cuanto esa evaluación pretende:
- Centrarse en las conductas o cambiantes criterios y otras en relación con ellas, para lo que se llevará a cabo un estudio servible del caso (ambiente deportivo) y del comportamiento que muestra el deportista o equipo deportivo, que nos permitirá:
- Detectar las condiciones que controlan las mismas. Las dos preguntas nos van a permitir poder orientar de manera correcta nuestra participación. Una vez hecha esta evaluación, que tendrá que disponer de la rigurosidad metodológica pertinente, se debería hacer una planeación de las alternativas y modalidades de participación o trabajo psicológico más correcto a cada situación y caso especial. La idealización involucra un proceso complejo, sin embargo, paralelamente determinante, por cuanto se realiza con el propósito de optimizar nuestra mediación.
Dicho proceso involucra:
- La definición de las metas que pretendemos conseguir.
- El establecimiento de las probables alternativas de actuación.
- La elección y puesta en práctica de una estrategia (programa de trabajo).
- La votación e implementación de las técnicas, artefactos y métodos más adecuados.
- El establecimiento de sistemas de control y evaluación parciales para efectuar los ajustes y las modificaciones oportunas en cada caso o situación.
- La evaluación final para revisar la consecución de las metas.
En esta idealización y programación se tendrá que considerar la necesidad de coordinación con lo demás de los especialistas en ciencias del deporte que se encuentren haciendo un trabajo con el deportista o equipo deportivo, para que de manera interdisciplinar se logre obtener la máxima efectividad de la mediación. Todo ello debería conformar parte de un programa de participación psicológica que podría ser o bien un programa de participación en el deporte de base e iniciación y deporte de descanso, salud y descanso, o bien un programa de entrenamiento psicológico propiamente dicho en el deporte de rendimiento. Tras la mediación se debería realizar una evaluación del nivel de consecución de las metas planteadas, así como la importancia de probables modificaciones a integrar en situaciones futuras de cara a mejorar nuestros propios resultados.
Compartir Publicacion