Lanzamiento de jabalina
Lanzamiento de jabalina
El lanzamiento de jabalina es una prueba de atletismo en la que, como su nombre sugiere, se lanza una jabalina, realizada con material reglamentario de metal o fibra de vidrio, a fin de que llegue lo más lejos viable. El lanzamiento de jabalina forma parte del programa de atletismo de los Juegos Olímpicos de la época actualizada a partir de 1908.
En este deporte el atleta debería disponer de una admirable coordinación, fuerza, rapidez, estado físico, para que la ejecución sea buena. El lanzamiento de jabalina integra una de las tantas destrezas de la disciplina del atletismo. La finalidad del lanzamiento de jabalina es conseguir la más grande distancia horizontal viable, y para conseguir este objetivo se tienen que tomar en consideración los componentes que incorporan, rapidez, exactitud, fuerza y distancia y la buena ejecución de la técnica.
Reglamento
Se lanza a partir de un pasillo de un extenso de 30 metros, acabado en un arco de 38 metros de radio. La zona de caída va a estar marcado con 2 líneas blancas de 45 centímetros de anchura, de tal modo que si los bordes internos de las líneas se prolongasen deberían pasar por las 4 intersecciones de los bordes interiores del arco y las líneas paralelas que delimitan el pasillo de fomento y que se cruzan en el punto central del círculo del cual el arco forma parte. La zona va a tener de esta forma 29º aproximadamente.
Para hacer cada intento, el atleta tiene un minuto. Comúnmente, cada atleta hace 3 intentos, y los 8 atletas con mejor marca válida, o todos si son 8 o menos, hacen otros 3 intentos en orden inverso a su mejor marca.
La jabalina se debe agarrar por la encordadura (al menos la mano del atleta debería tocarla), y lanzarse por arriba del hombro o del brazo de arrojar; no se posibilita lanzarla en rotación ni puede el atleta ofrecer la espalda al sector de caída anterior a soltar la jabalina; los estilos no tradicionales no permanecen autorizados. Si la jabalina se rompe en el intento o en el aire no se contará como nulo; tampoco si la rotura hace perder la igualdad al atleta y hace que toque fuera del arco; en esta situación se le dejará volver a iniciar. En la caída, la punta metálica debería tocar el suelo previamente que cualquier otra parte de la jabalina. El atleta debería mantener la jabalina por la empuñadura situada en su centro de gravedad y lanzarla por arriba del hombro y cerca del oído u orejas.
Beneficios del lanzamiento de jabalina
El lanzamiento de jabalina está gobernado por los inicios de la física más primordiales: por la potencia, la fuerza, por los de la resistencia al aire y por los de la naturaleza de los materiales de los que permanecen elaboradas las jabalinas.
Generalmente, los atletas que participan en las competiciones de lanzamiento de jabalina acostumbran ser elevados y con una gigantesca potencia física, además, tienen enorme agilidad, destreza, rapidez y, desde luego, fuerza.
Los lanzadores acostumbran tener un hombro excepcional, en el sentido de que lo tienen la posibilidad de doblar y flexibilizar con sorprendente facilidad. También poseen un codo realmente bien entrenado y flexible.
Al igual que en lo demás de las destrezas atléticas, los lanzadores de jabalina realizan uso de unas singulares fibras explosivas, que les ayudan además en la aceleración de la carrera con pocos metros para llevarla a cabo.
Es bastante completo a partir de la perspectiva psicomotora y practicándolo se trabajan enorme proporción de conjuntos musculares, a partir de brazos a extremidades, pasando por espalda, abdominales y lumbares.
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Grupo EdTech Universal Formación
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