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Especialidad de Enfermería en Cuidados Médico-Quirúrgicos

¿En qué consiste la enfermería médico-quirúrgica?

Una vez que una persona entra en un quirófano para una participación, son bastantes los expertos que intervienen en el proceso. Uno de ellos, en específico, es el especialista en enfermería de cuidados médico-quirúrgicos.

Lo cierto es que una buena mediación quirúrgica debería disponer de un enfermero delegado de todo lo referente con la limpieza y de que el paciente está calmado y confiado. Aquellas son varias de las funcionalidades que hace el enfermero en el quirófano, empero no son las únicas.

Después, te contamos en qué radica exactamente la enfermería médico-quirúrgica, cuáles son las tareas del enfermero y qué competencias tiene que tener.

¿Qué es la enfermería médico-quirúrgica?

La profesión de enfermería está presente en diferentes campos y superficies y uno de los sitios donde más es necesario su ayuda es en los quirófanos, más que nada, ya que ayudan a otros expertos del área, como los anestesistas o los cirujanos.

En este sentido, la OMS reconoce a la enfermera quirúrgica como la responsable de la estabilidad del paciente quirúrgico y la que junta a todo los accesorios.

Por consiguiente, son diversas y variadas las funcionalidades que poseen en esta área, aun cuando la mayor parte se centran en los cuidados del paciente, la atención y el apoyo al resto de expertos y en la limpieza de las herramientas y conjuntos.

La mayor parte de los enfermeros del departamento de cirugía trabajan en quirófanos, aulas de anestesia y aulas de recuperación, aun cuando además tienen la posibilidad de laborar en muchas otras zonas, como la de emergencia o unidades de cuidados intensivos.

¿Cuáles son las funciones de un enfermero médico-quirúrgico?

Principalmente, en el momento de responder a la pregunta de qué es lo cual hace un enfermero médico-quirúrgico, la contestación frecuenta ser que ayuda al resto de expertos y elabora al paciente, empero lo cierto es que su campo de actuación es muchísimo más largo.

Lo cierto es que su primordial tarea es ejercer los cuidados necesarios a los pacientes que se van a dominar a una participación quirúrgica, o sea, se delegan del buen estado del paciente previamente, a lo largo de y luego de la operación.

De esta forma, el profesional en enfermería tiene que hacer tests profundos a los pacientes antecedentes de ser operados para, así, conocer al detalle su estado físico y aprender los peligros que tienen la posibilidad de manifestarse. Además, además tiene que aseverarse de que el cirujano tiene el historial clínico adecuado y de que los medicamentos y todos los grupos permanecen de forma correcta esterilizados y preparados.

Por cierto, una vez el paciente entra en la operación, su finalidad es, como dijimos previamente, servir de soporte al resto de expertos; sin embargo, además se ocupa de mantener el control de los monitos y otros grupos, como las máquinas de anestesia, ventiladores y sueros. Todo ello para asegurar la estabilidad del paciente.

Además de laborar con el anestesista para revisar el estado del paciente, además le acercan el material al cirujano que este vaya necesitando en todo instante. Una vez acaba la mediación, ayudan a mantener el control de los efectos de la anestesia y a reposicionar al paciente.

El enfermero además labora con el paciente en la fase de recuperación. Asimismo, deben mantener el control de que, una vez que el paciente despierte de la anestesia, se encuentre aseado y con las heridas, causadas por la operación, en estupendo estado.

Además, son ellos los que evalúan al paciente para identificar probables complicaciones y determinan si se le puede transportar a su habitación otra vez.

¿Qué competencias tiene que tener un enfermero médico-quirúrgico?

Ser enfermero médico-quirúrgico no es simple, debido a que se debe mantener el control de varios puntos para aseverarse de que todo el proceso quirúrgico se hace de manera correcta. De esta forma, en medio de las propiedades más destacadas que tiene que tener un enfermero que desee especializarse en este entorno está:

  • Saber reaccionar con velocidad y de manera instantánea frente a cualquier situación.
  • Conservar la concentración y ser metódico, debido a que se labora bajo mucha presión.  
  • Tener un equilibrio de la mente, emocional y profesional que le posibilite encarar cualquier situación de emergencia, así sea en la sala de operaciones o en cualquier departamento.
  • Pasión e interés por la tecnología, la ciencia y la salud.
  • Capacidades prácticas correctas para la implementación de artefactos pequeños y delicados.
  • Debería ser una buena persona, agradable, amistosa y saber ofrecer soporte a los pacientes para que se encuentren tranquilos y no angustiados. Además, tiene que ser paciente, comprensivo, tolerante y respetuoso.

¿Cómo puedo especializarme en la disciplina médico-quirúrgica?

La enfermería es una disciplina que encierra una enorme muchedumbre de entornos y, como es usual, no todos tienen la posibilidad de aprender en hondura en los estudios universitarios. Es por esa razón que varios necesitan de una especialización, como es la situación de la enfermería médico-quirúrgica.

La formación continuada es un aspecto clave para la optimización profesional y para profundizar en entornos que necesitan de una más grande implicación y formación. Y una de las posibilidades más cómodas y beneficiosas para esta enseñanza es la formación en línea.

En este sentido, hay diversos programas formativos que tienen la posibilidad de hacer a distancia centrada en la enfermería médico-quirúrgica, como el Experto Universitario en enfermería de quirófano y cuidados intra-operatorios o el Máster en Enfermería médico-quirúrgica.

¿A qué se dedica un enfermero médico-quirúrgico?

La tarea primordial de esta clase de enfermeros es regir los cuidados necesarios a los pacientes que requieren una participación diagnóstica y/o terapéutica de tipo doctor – quirúrgico, tanto previamente, como a lo extenso de y luego de la misma. Aquí, el enfermero pertenece a un equipo multidisciplinar y su tarea es tan importante como la del cirujano y el anestesista. Para realizar exitosamente su trabajo, el enfermero requiere tener las mismas cualidades primordiales que cualquier otro enfermero, empero además ha de hacer gala de una enorme atención por el detalle, ser bastante preciso, tener una alta capacidad de concentración, así como saber laborar y reaccionar bajo presión.

El enfermero tiene que hacer un examen intensivo al paciente previo a empezar la mediación para revisar con detalle su estado físico y poder evaluar sus necesidades, así como probables peligros. Además, tiene que verificar que su historial clínico es conveniente y está actualizado y, luego, ayudará además a transportar al paciente al quirófano.

Una vez ahí, el enfermero se convierte en el soporte fundamental de anestesista y cirujano, a quienes ha de ofrecer soporte y apoyo siempre. Labor suya es además elaborar y mantener el control de todos los conjuntos, instrumentación y medicación elementales para la mediación. El enfermero tiene que estar preparado para reaccionar con velocidad y efectividad, atendiendo al paciente frente a cualquier complicación.

Una vez que la participación ha finalizado, el enfermero sigue estando a cargo del paciente, ocupándose de que salga bien de la anestesia, de trasladarlo a la habitación, de hacer una totalmente nueva investigación para evaluar su estado y eludir probables infecciones o complicaciones en el posoperatorio. Además, tiene que supervisar la recogida del instrumental para que logre ser esterilizado.

¿Qué se necesita para ser enfermero médico-quirúrgico?

Desde luego, para hacer de esta actividad tu profesión hace falta una extensa preparación tanto académica como práctica que te dé los instrumentos y recursos necesarios para ejercer tus tareas y responsabilidades dentro del quirófano. Obviamente, el primer paso es pasar por la universidad para obtener el nivel en Enfermería.

Una vez conseguido el título universitario, si deseas tener la especialidad oficial de enfermería médico-quirúrgica, tienes que aprobar la prueba EIR para ser Enfermero Interno Residente y superar 2 años de formación práctica y remunerada en alguno de los centros públicos y privados que dan esta clase de plazas. Sé consciente de que te enfrentas a un proceso largo y difícil en el cual te vendrá realmente bien hacer un curso preparatorio para el EIR, así sea presencialmente en una academia o de modo en línea.

Además, para estar constantemente actualizado, una buena iniciativa es apostar por la formación continuada llevando a cabo másteres y cursos de enfermería que ahonden en las diferentes ramas de la enfermería geriátrica. Otra alternativa interesante es entrar a congresos de Enfermería Quirúrgica, una posibilidad exclusiva de reunirte en persona con otros expertos del sector en un lugar de debate y aprendizaje. Desde luego, constantemente es buena iniciativa estar al día de esta época, empresas como la Sociedad De España de Enfermería Quirúrgica y diversas escuelas de enfermería son perfectas para descubrir información y apoyo.

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